Insulina
La insulina baja la glucemia haciendo que el azúcar pase de la sangre a las células del cuerpo (como los músculos) para ser utilizada como energía. La insulina se administra mediante inyecciones.
Se mide en unidades. Hay varios y distintos tipos de insulina que el médico puede recetarle dependiendo del motivo por el que la necesita. Algunos tipos de insulina actúan de forma rápida y otros actúan de forma lenta, dependiendo de qué necesita que haga la insulina. Asegúrese de leer la etiqueta en el frasco de la insulina.
Debe inyectarse la insulina todos los días a la misma hora del día. Lea la Guía de la diabetes para más información sobre cuándo administrarse la insulina.
Miedos sobre la insulina
Las personas suelen tener miedo al comenzar el tratamiento con insulina porque han escuchado historias de sus amigos y familiares que, generalmente, no son ciertas. La insulina no provoca ceguera o la amputación de un brazo o una pierna. Tales complicaciones ocurren cuando las personas con diabetes han tenido hiperglucemia durante un período de tiempo, que ha dañado distintas partes del cuerpo. De hecho, esperar demasiado para comenzar el tratamiento con insulina puede dañar partes del cuerpo.
Dónde colocar las inyecciones de insulina
Las personas que se colocan las inyecciones de insulina por sí mismas tienen una zona corporal favorita para colocarlas. No es una buena idea porque puede endurecerse y luego la insulina deja de actuar bien.
- El vientre (o abdomen) es la mejor parte.
- No coloque las inyecciones en los músculos.
- No las coloque en cicatrices o partes infectadas.
- Colóquelas siempre en zonas distintas. No frote la zona tras la inyección.
A veces, le saldrá un moretón, o una o dos gotas de sangre, en la zona donde colocó la inyección. No frote la zona, sólo presione por 15-20 segundos para detener el sangrado. Avísele a su médico o enfermero sobre erupciones o cambios en la apariencia de la piel en la zona donde colocó la inyección de insulina. No deje la insulina sin hablar con su médico primero.
Cómo colocar la inyección de insulina
Siga estos pasos para inyectar la insulina:
- Pellizque la piel
- Puye su piel con la aguja
- Presione. Si utiliza una jeringa: presione el émbolo hasta abajo. Su utiliza una pluma: presione el botón hasta ver el número “0”.
- Pare: deténgase después de que la medicina entre y cuente hasta “5”
- AParte: saque la aguja
Para descartar las agujas sin peligro, ponga la aguja de la pluma y la jeringa en un recipiente de plástico grueso, como una botella de blanqueador. Tape la botella cuando se llene y tírela a la basura. No utilice recipientes de plástico fino, como jarras de leche.
Cómo almacenar la insulina
Coloque la insulina que no utilice en el refrigerador. Mantenga los frascos que utiliza lejos del sol y el calor. Revise que no haya cristales, astillas o bultos. Si no almacena la insulina de manera correcta, se echará a perder rápidamente. Siempre asegúrese de que la insulina no esté vencida.